En el caminar en Cristo tienes que avanzar, porque el Señor nos ha dado talentos, dones y habilidades especiales a cada uno de nosotros, y son con un fin especial de ser útiles en el reino, en Mateo 25:14-15 dice: "El reino de los cielos será también como un hombre que, al emprender un viaje, llamó a sus siervos y les encargó sus bienes. A uno le dio cinco mil monedas de oro, a otro dos mil y a otro sólo mil, a cada uno según su capacidad. Luego se fue de viaje."Así el Señor nos reparte y nos ha confiado que cuidemos esos talentos pero también que saquemos el mejor provecho de los mismos.
También dice en Mateo 25:16-18: "El que había recibido las cinco mil fue en seguida y negoció con ellas y ganó otras cinco mil. Así mismo, el que recibió dos mil ganó otras dos mil. Pero el que había recibido mil fue, cavó un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor." Cuando se nos da talentos es porque al Señor se nos ha complacido y sabe que los podemos cuidar y darle el uso necesario y aún aumentar la utilidad de los mismos, pero por muchos argumentos no los utilizamos, por pereza, porque anteponemos cosas personales que al final son vanidades, porque tenemos miedo de usarlas y hay duda en nuestros corazones.
En Mateo 25:19 dice "Después de mucho tiempo volvió el señor de aquellos siervos y arregló cuentas con ellos. El que había recibido las cinco mil monedas llegó con las otras cinco mil. “Señor dijo, usted me encargó cinco mil monedas. Mire, he ganado otras cinco mil.” Su señor le respondió: “¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! En lo poco has sido fiel; te pondré a cargo de mucho más. ¡Ven a compartir la felicidad de tu señor!” Como este buen siervo debemos hacer con los talentos que el Señor nos ha dado, porque cuando entreguemos cuentas de lo que se nos ha dado y nos gocemos con el Señor que hemos sido siervos fieles y aprobados.
En Mateo 25:21 dice: "Llegó también el que recibió dos mil monedas. “Señor informó, usted me encargó dos mil monedas. Mire, he ganado otras dos mil.” Su señor le respondió: “¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! Has sido fiel en lo poco; te pondré a cargo de mucho más. ¡Ven a compartir la felicidad de tu señor!” Después llegó el que había recibido sólo mil monedas. “Señor explicó, yo sabía que usted es un hombre duro, que cosecha donde no ha sembrado y recoge donde no ha esparcido. Así que tuve miedo, y fui y escondí su dinero en la tierra. Mire, aquí tiene lo que es suyo.”Pero su señor le contestó: “¡Siervo malo y perezoso! ¿Así que sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido? Pues debías haber depositado mi dinero en el banco, para que a mi regreso lo hubiera recibido con intereses." El siervo que le fue confiado dos talentos tuvo frutos, pero el siervo malo que guardó el talento único que le habían dado fue desechado, así que esto nos enseña a reflexionar que el Señor nos ha dado la oportunidad de tener dones y talentos, pero no siempre les damos la mayor utilidad, así que si tu estás en la condición del siervo malo, pídele al Señor que te perdone y cambia tu condición para ser un siervo fiel. Mateo 25:28 dice "Quítenle las mil monedas y dénselas al que tiene las diez mil. Porque a todo el que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia. Al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene."
Señor oro porque podamos ser esos siervos útiles y podamos ser esos siervos que tienen en abundancia y no los que se les quita lo poco que tienen porque no hacen lo que tienen que hacer, que no tengamos temor ni pereza en hacer las cosas para el Señor y que busquemos siempre la intimidad con el Espíritu Santo para que no nos desviemos, para que hagamos según se nos ha pedido y podamos seguir adelante tomados de la mano del Señor, con gozo y con ganas de continuar en el nombre de Jesús, Amén.
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