lunes, 8 de junio de 2015

Caminando hacia la tierra prometida - Día 13

Hoy es un buen día para que tengas gracia ante los ojos de todos...

Éxodo 11:3 Y Jehová dio gracia al pueblo en los ojos de los egipcios. También Moisés era tenido por gran varón en la tierra de Egipto, a los ojos de los siervos de Faraón, y a los ojos del pueblo. El inicio de Moisés para llevar a Israel hacia la tierra prometida fue lleno de duda y temor pero en el transcurso del tiempo el Señor lo transformó, se fue la incredulidad en Moisés y también de la forma como el pueblo de Israel lo miraba.  Si tu comienzo ha sido difícil y quizás nadie crea en ti quiero decirte que Dios puede transformarte, actualmente quizás no seas la persona a seguir un modelo o un líder pero Dios está trabajando en ti y te convertirá en esa persona útil que Dios puede usar en cualquier momento.

Éxodo 11:7 Pero contra todos los hijos de Israel, desde el hombre hasta la bestia, ni un perro moverá su lengua, para que sepáis que Jehová hace diferencia entre los egipcios y los israelitas. Quién te conoce más que Dios, nadie por eso él sabe que es lo que piensas y que sientes en lo profundo de tu corazón tus verdaderos sentimientos y anhelos y si tu has encontrado gracia en los ojos del Señor Él no se apartará de ti, perfeccionará la buena obra que ya empezó en ti y en ese lugar donde ahora estás por más pequeño e insignificante  o común que creas que eres o estás ante las demás personas, el sabe que eres diferente y escogido (a) y apartado (a)  por Dios para grandes cosas.
Éxodo 11:9 Y Jehová dijo a Moisés: Faraón no os oirá, para que mis maravillas se multipliquen en la tierra de Egipto. Aunque estás entre los Egipcios, el te cuidará, hará maravillas alrededor de tu vida y todos sabrán que eres hijo de Dios, oro porque Dios derrame gracia abundante ante los ojos de todos, te abra camino y te ponga en lugares privilegiados, que cada día tu transformación sea más notable ante los ojos de todos, que el Señor siga perfeccionando esa buena obra en ti, en el nombre de Jesús, Amén.

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