Sin duda, Pablo era un hombre lleno del Espíritu Santo y si amas al Espíritu Santo, amas a Cristo y si amas a Cristo amas a Dios, al tener Pablo una relación especial con el Espíritu, cada día lo estimaba más, cada día lo anhelaba y cuando tienes una relación así no puedes dejar de amarlo y de querer ser como Él. Pablo tubo un encuentro sobrenatural con Jesús, pero no le bastó solo ese encuentro el continuó siguiendo sus pasos y no estaba solo porque el Espíritu glorifica a Cristo, así que Pablo sabía que si lo amaba, debía dar un buen testimonio digno de ser también ejemplo para otros.
Así como Pablo siguió el ejemplo de Jesús, tu debes hacerlo y sabrás que siguiendo el ejemplo de Cristo serás tu también de buen testimonio para muchos.
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