Cuando estamos pasando por momentos en que nuestra fe se debilita, necesitamos que la esperanza no se pierda, porque si se pierde la esperanza se pierde todo.
Pero la paciencia viene en el tiempo de la espera del cumplimiento de las promesas, pero hay algo en tu interior que no permite que pierdas la esperanza y aunque todos alrededor se burlen de la palabra que te da aliento, es cuando más debes de creer que Dios en un momento puede cambiar cualquier situación.
En Romanos 5:4 dice: " y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza;" en la prueba eres preparado para enfrentar las cosas que pensabas que no podías soportar, te da sabiduría para prepararte para la bendición, no dejes que nada te robe la esperanza, porque seguramente pronto viene tu respuesta.
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