Ya que Dios desea que no juzgues a otras porque el tiene el poder de transformar cualquier corazón si así lo desea, el es soberano, pero también es misericordioso.
Así que si estás clamando por la salvación de tu familia y amigos y un cambio en tu país, sigue clamando hasta ver tu respuesta, pidiendo misericordia por sus vidas.
En Romanos 14:9 dice: “Porque Cristo para esto murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así de los muertos como de los que viven.” El es Señor de todo, así que hoy entrégale al Señor tus peticiones y todo lo que pueda inquietarte, el es tu restaurador.
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