Cuando buscamos la justicia, debemos entregarnos a la justicia de Dios en Filipenses 3:9 dice: "Y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe".
Es mejor entregarse a la justicia de Dios, porque es misericordioso y ama a sus hijos, si hemos pecado Él nos perdonará y nos restaurará, pero si nos lastiman, aún es más importante entregarse por fe a Él que a su debido tiempo nos hará justicia. No importa si tu nombre ha sido difamado, si has sido despreciado, o desechado, hay batallas que no tendrás que hacer nada, Él las peleará por ti y la honra será solamente de Dios, para que nuestra fe crezca.
No pierdas la fe, Dios está sobre la misma ley y sobre todo, Él es justo, Él es la justicia y hará contigo conforme a sus propósitos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario